La peste arrasaba con nosotros, y nuestro gobierno no financiaría otro viaje para la colecta de nuevos sujetos de prueba. Teníamos que iniciar el reporte del experimento y esperar que el director del proyecto entendiera las complicaciones. Mi compañero se encargó de escribir la bitácora:

       Fecha: 22 de septiembre del 2073

       Hora: 3:57 p.m.

       Lugar: Laboratorio de virología experimental. Centro Intergaláctico de Contención de Enfermedades (CICE).

       “El número de ejemplares de esta especie disminuye drásticamente, consecuencia de la contaminación y perturbación de su ambiente. La predicción por computadora indicaba que la enzima rompería la membrana del virus y evitaría que el individuo se infectara, pero terminó destruyendo las neuronas de nuestro último modelo experimental, el último modelo de Homo sapiens. Procedo a desechar los residuos”.

Foto de NASA en Unsplash
Previous articlePatagonia
Next articleCon la patria destruida