nos retorcemos
somos todos idénticos
triángulos revoloteando
su trabajo de colores
bajo el cielo
de las tres
de la tarde
mientras los esquites
hierven como siempre
salados
en su agua puerca
seguimos trabajando
aunque sean
las tres
de la tarde
una vez que permites
que te afiancen como a un globo
de pepa pig con cinta
entonces nada
podrá sostenerte: de nuevo
ni los pájaros pueden
callar el pitido del señor
del tráfico: llora un niño
qué quiere
mi niño: quiere
que le compren
un volován: por favor
cómprame
unos minutos en otra fila
un poco de sus risas
llenas del helado obeso
del ángel
el aceite
zambulléndose
en los churros:
la melodía
de las tres
de la tarde
retumba el masticar
de unas papas fritas
el himno nacional
las trompetas
sus tambores
la banda de secundaria
truena al ritmo de las bolitas
en los cigarrillos de nuestros padres
pero ellos
no pudieron
pero yo pensé
que podría
pero no puedo
con la camiseta
ya me puse
el banderín
mira qué lindo
a las tres
de la tarde
no hay tiempo
que a mi farol nadie lo prenda
mi huella es una bombilla
blanca y rota
chispeando verde luz
junto a otras bombillas sudadas
a las tres
de la tarde
pero qué lindo es que volteen
aquí arriba
y digan qué bonito
adorno
qué bonita esta fiesta
patronal
pero nadie
desde mucho tiempo
oye nuestro llanto
cuando pasa el aire