El suicidio y la prevención del suicidio siguen siendo tema tabú en la sociedad mexicana. El simple hecho de encarar a la muerte por decisión propia sigue siendo un asunto que genera reacciones que van desde la repugnancia hasta la lástima.

En México, existen pocas instituciones dedicadas al cuidado de la salud mental. Entre 1990 y 2015 la tasa de suicidios se duplicó en el país al pasar de 2.4 por cada 100 mil habitantes a 5.2 de acuerdo con datos del INEGI. En 2015, se registraron 6,285 suicidios siendo Chihuahua, Aguascalientes y Campeche los estados con tasas más altas; 11.4, 9.9 y 9.1 respectivamente.

La depresión y sus consecuencias sobre la vida de las personas que la padecen y la de las personas que rodean al paciente suele verse como un asunto de voluntad no ejercitada. Con relación a enfermedades mentales como la esquizofrenia y la bipolaridad, el rango de tolerancia, aceptación, información y por ende soluciones prácticas a corto, mediano y largo plazo, sigue siento un misterio. De hecho, los temas de salud mental forman parte de una entrelazada red de entramados y mitos que demeritan la labor de psicólogos, psiquiatras y expertos en la salud que trabajan día a día con pacientes y padecimientos.

Es imposible resolver una problemática de salud pública tan compleja si no se cuenta con información ni herramientas para comprender, atender e implementar una estrategia que vaya más allá de la concientización y la inclusión, y más bien hacia la resolución y concertación de mecanismos para que los pacientes con enfermedades mentales tengan acceso a una vida que merezca la pena ser vivida. Este asunto de salud pública pasa por todos lo ámbitos de construcción social de la sociedad mexicana que no está lista aún para absorber en sus entrañas el hecho de que los padecimientos mentales existen y pueden ser tratados.

Una estrategia completa de prevención del suicidio debe incluir un modelo psicoeducativo en el cual se expliquen estadísticas oficiales sobre el comportamiento suicida, se analicen los mitos y realidades del suicidio, se contemplen los factores de riesgo y las posibilidades de protección para implementar estrategias de detección y abordaje inicial de personas en riesgo suicida. Identificando las fases previas oportunamente, es posible dar pie a una intervención adecuada. El conocimiento de la dinámica suicida, sumado al reconocimiento de los factores de riesgo, puede prevenirlo.

En México, el suicidio sigue siendo un tema motivo de tabú, lo cual obstaculiza la prevención. Las enfermedades de salud mental no son un juego, tienen soluciones tangibles y prácticas que pueden mejorar la calidad de vida de las personas que las padecen y quienes los rodean.

Foto de engin akyurt en Unsplash
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25 años de pura prueba y error. Teatrera desde la infancia, Desarrolladora Territorial por profesión. Letrera por afición. Deliberada adicta a los dichos populares. Neo no nazi. UNAM ENES León 2016-2020 Desarrollo Territorial, primera generación.

5 COMMENTS

  1. Veo que has estudiado bien el tema del suicidio pero porqué se suicida la gente, a quien quieren castigar lis que se suicidan a quien quieren castigar para que se echen la culpa del suicidio y toda la vida piensen q por culpa de él o ella se suicidó una o una. Si hay que tener consejos de alguien que te haya estudiado porque es ha y muchos productos químicos que ingerimos y nos hace ver la vida a través de EE un cristal de un color u oí trozo color me recuerda una canción y esto es abaratar el pensamiento y la canción decía yo conocía a un muchacho que me decía que si yo lo olvidaba se moriría, pero es lo cierto, que yo ya lo he olvidado y el no se ha muerto. Cuántos adolescentes que no llegan a los 10 años se han suicidado cuanto a estudiantes franceses y japoneses se suicidan porque no pasaron un examen.
    Hay un suicidio justificado que la iglesia católica no perdona el suicidio de las personas que están sufriendo alguna enfermedad terminal y dolorosa o condición en la cual la cabeza piensa y el resto del cuerpo está paralizado no hay calidad de vida y si sufrimiento físico y mental de esto hay obra de teatro y película en cine que te hace pensar claro que para suicidarse alguien que no puede manejar los brazos donde lo único realmente vivo es el cerebro tiene que ser un suicidio ayudado y esto la iglesia no lo perdono y antiguamente no los dejaban enterrar en el cementerio católico y que los jueces no se atreven a legislar algún cambio. Somos más humanos y generosos cuando tratamos con nuestra mascota que cuando tratamos a un ser querido humano pero vivimos en una sociedad donde impera la hipocresía. Confieso que yo no he estudiado ni enfermedades mentales ni este tipo de comportamiento pero si veo que es una cosa un fenómeno que hay que estudiar para salvar o convencer con charlas. Incluso gentes que hayan estudiado y darlas en las universidades y quizás empezar con ejemplos simples desde la primaria.

  2. Hace poco más de año y medio pensaba en suicidarme, es difícil hablar con una persona que no se impresione y te tome en serio. Pero no veo la respuesta en estadística o retorica absurda. Si me permite le contare mi historia y me gustaría obtener una respuesta.

    Tenia 18 seguía enamorado de una chica que me rechazo muchas veces. A ella la ofendí profundamente, con palabra y pensamiento y esto me lleno de dudas. Entonces leí ‘Las desventuras del joven Werther’ y me pregunte si era lo necesario, si era lo correcto. (Todavía pienso en ella como mi Lotte.) Como había visto en su habitación un ejemplar de ‘Cien años de soledad’, cuando se lo explique la comparaba con Remedios ‘La bella’ y yo como aquel soldado, que no sería la primera ni ultima vez que se contará esa historia. Cometí muchos errores con ella hasta el final.

    Como yo lo veo para muchos la duda es un signo de debilidad y por lo tanto debe erradicarse. En síntesis, hoy en día las personas ser hartan de escuchar a Hamlet, si se me permite compararme con él.

    Todo lo que va de este año he estado encaprichado con una chica, le digo Galatea por un poema de Góngora, y entre más investigo, mas convencido quedo que el nombre le queda el sobrenombre, e igual solo se su nombre de pila.

    Fue en libro de Kierkegaard sobre la ansiedad que entendí la humildad es el bálsamo de todos los deseos. Ella sabia que la quería, pero mi duda había sido: ¿Le digo o no le digo? Que era pobre y que si quería darle regalos, tendría que trabajar de mesero o algo por estilo, que mi sueño era leerle en voz alta y que sentía la necesidad de inscribir su voz en mi alama… Porque Galatea tiene poco más de 15 años.

    Yo aún me veo como Raskolnikov que necesita desesperadamente una Sonia, una Santa Lucía que perdone mis pecados. No necesito que nadie me explique los riesgos, mitos y factores del suicidio, si hubiera un respuesta sencilla a mis preguntas no me la crería aunque me la dijera una zarza en llamas. Las preguntas que tengo son personales, quiero que las responda alguien a quien quiera. Nadie lo entiende o quizás nadie lo quiere entender, sin importar con cuanta claridad lo diga, pero peleo con mi incomprensión de lo femenino.

    Las cosas con Galatea acabaron mal.

    Se que mi siguiente pareja me definirá como persona, en la forma en como trato y entiendo a las mujeres, como balanceo mi sexualidad y mi autoestima, etc. Yo la imagino como una Sor Juana, una mujer de sexualidad ambigua y oscura, pero llena de vida e inteligencia.

    Todo esto a revivido mi tentación, pues ¿no es peor vivir para decir “muero porque no muero”, no es acaso más virtuoso fenecer que lastimar? Conozco la respuesta ‘políticamente correcta’ pero ¿que hacer? ¿como explicarlo a alguien más? ¿cuanto tiempo habré de pensar en esto? Son las preguntas que necesito.

    Estoy seguro que hablas en serio y que quieres ayudar, pero, a veces es mas verdadero algo personal que algo científico. Si te paso a ti, no cuentes que te ayudo tu familia o tu pareja, porque eso duele más para quien no puede ser ayudado de esa forma. Primero hay que hacerle entender que su duda, la duda, es legitima, y no es fácil de responder. Después hay que hacer ver, que a pesar de todo la elección es suya, y que tu no intentarás decirle que escoger. Yo diré que lo me ha mantenido vivo a mi son mis otras dudas sin resolver, cosas que necesitan en apariencia cinco minutos más, algo valioso e intrigante, para mi es el aroma del cabello de una mujer. Has de condenarlos a este paraíso de lo absurdo con un poco de epicureismo, porque han retornar a ese aroma. Finalmente hay que explicar que esa duda volverá, y no todos llegan a salvarse, pero salvarse en mucho más valioso que nunca haber dudado, y no olvidar que hay más preguntas.

  3. Fernando Castillo,
    Te agradezco hayas tomado el tiempo de leer mi escrito. En primer lugar, no es una cuestión de salvación, más bien de aprender a vivir con uno mismo, conciliando las partes que nos componen (en todos sentidos). El sufrimiento es una condición autoinducida al revivir un hecho doloroso del pasado un millar de veces en un intento de explicarlo y cambiarlo. Hay que entender por qué pasó lo que pasó, cómo podemos evitarlo la próxima vez y qué se puede hacer con los sentimientos no expresados que se cristalizan en pensamientos suicidas, esto con la finalidad de la mejor manera, es decir, de la manera más sana posible.

    Conocer cuáles son las tasas de incidencia de casos nos permite entender el fenómeno, por qué sucede, en dónde y en qué grupo de edad ocurre. Conocer las fases previas al acto suicida permite prevenirlo: esto incluye conocer los detonadores es decir los factores de riesgo para detectarlo y hacer una intervención adecuada a la situación particular del paciente.

    La salvación no existe, joven Castillo, lo único que nos corresponde en esta vida es cargar nuestro propio peso de la mejor manera que podamos. Le agradezco su tiempo y genuinamente espero que encuentre maneras constructivas de lidiar con su dolor, le sugiero meditar.

  4. Yo considero que si alguien quiere suicidarse tiene todo el derecho de hacerlo, lo único de lo que uno es dueño es de su vida y si siente que su vida es muy triste o vacía hasta el estado debiera apoyar su decisión, se necesita mucho valor y determinación para llevar a cabo ese acto.Solo por que los que le rodean no quieren morir o tienen miedo de morir no tienen por que juzgar o criminalizar al que ya no está agusto en este mundo,¡ que más da! La vida es un suspiro no hemos de tener miedo y respetar al otro.

  5. Una cosa es cierta, con los recortes continuos al gasto educativo no vamos a ir a parar a ningún lado, con los recortes al sistema de salud no vamos a ningún lado, con la corrupción etcétera.
    Hay muy pocos psiquiatras por número de habitantes en este país y si la situación es crítica en las zonas urbanas no quiero ni pensar lo que ocurre en las zonas rurales.
    Yo pienso , pero eso es sólo mi hipótesis, que el aumento en el número de suicidios tiene que ver con la pobreza, la violencia extrema y la exclusión de un amplio espectro de la población que se ve condenado a arrastrar una vida de miseria sin acceso ni a los servicios ni a los derechos humanos fundamentales.
    Muchos recurren al alcohol y las drogas por desesperación: para olvidar el hambre, el frío, el terror de no saber mañana que se va a comer si es que se va a comer algo.
    Esa es la parte políticamente “incorrecta del tema”, y esos muertos son los olvidados entre los olvidados.